Desde Brooklyn nos llega esta ingeniosa forma de cubrir dos necesidades habituales de un edificio eco con un solo producto. La hiedra artificial de Solar Ivy proporciona sombra en fachada, ventilación al poder funcionar como muro cortina, captador solar fotovoltaico, y estética.
Un producto digno de reseñar que integra de forma ingeniosa muchas de las necesidades y con grandes posibilidades de personalización y adaptabilidad al edifico y entrono.
No conocemos su rendimientos, ni tampoco el periodo de amortización, pero en su calculo habrá que tener en cuenta que cumple varias funciones, ( cerramiento, sombra, estética, captador solar ahorro energía tanto por captación como por minorar consumos de climatización).
Enhorabuena, well done Solar Ivy!!, esperemos pronto aplicarlo ne alguno de nuestros edificios.
Fuente: Solar Ivy